Durante 60 días los 252 representantes del pueblo que conforman la Cámara de Diputados estuvieron en silencio. Este 13 de mayo, será una fecha histórica para el Poder Legislativo, los diputados en una sesión mixta, presentes en el reciento unos 40 y el resto a distancia, conectados por una plataforma informática, volvieron a deliberar. Se aprobaron dos proyectos y se escuchó la voz de la oposición cuestionando el DNU 457/20, que otorga superpoderes al Jefe de Gabinete para la reasignación de partidas del presupuesto nacional.
El temario fue acotado, pero al cabo de seis horas de deliberaciones se aprobaron por unanimidad dos proyectos, el primero: un régimen que dispone eximir del impuesto a las ganancias sobre las horas extras y las guardias obligatorias que realice el personal de la salud, de las Fuerzas Armadas y de las fuerzas de seguridad abocados a la lucha contra la pandemia, y el segundo un programa de protección al personal de la salud que incluye la obligación de realizar tests de diagnóstico y la aplicación de estrictos protocolos y de medidas de bioseguridad en los establecimientos sanitarios.
El encuentro mixto, presencial y virtual, presidido por el jefe de Cámara Sergio Massa, que comenzó minutos después de las 18hs. si bien se deslizó ordenadamente, no estuvo exento de chicanas políticas.
El diputado de la UCR, Mario Negri, presidente del Interbloque de Juntos por el Cambio, planteó: “Para los debates más importantes pendientes esperamos que los colegas puedan volver a sentarse en el recinto. Porque el debate parlamentario rico es cara a cara. El Parlamento es control, es comisiones a pleno, es donde se pide un juicio político o expone el Jefe de Gabinete” y señaló respecto al DNU de los superpoderes: “El estado de excepción no lo podemos permitir, el DNU es una facultad constitucional, pero es un retroceso innecesario”, y Negri enfatizó “Que el Presidente no se crea dueño de la verdad”.
La respuesta desde el oficialismo, por los superpoderes estuvo en la voz del diputado Leonardo Grosso, del Frente del Todos, que había escuchado en forma cercana instrucciones de Máximo Kirchner, y lanzó: “Los que hablan de superpoderes empecemos a evaluar los ‘superproblemas’ que nos dejaron, la ‘supercrisis’”, y enumeró algunas cifras de la herencia económica. El jefe de la bancada oficialista, Máximo Kirchner, entró en el ruedo y afirmó: “Si el Presidente y el jefe de Gobierno sienten la presión de los sectores económicos, sepa que cuentan con nosotros”.
Por su parte, Graciela Caamaño, del Bloque PJ federal, se sumó al pedido de derogación del DNU de los superpoderes: “No queremos que reaccionen, queremos que lo deroguen”. La legisladora aprovecho además para “pedir perdón a los argentinos” por no haber puesto antes en marcha el recinto. “Creo que los argentinos necesitaban vernos en este recinto, aun cuando a veces hablamos pavadas”.
Desde la bancada del PRO Ritondo y Ferraro insistieron: “El tapabocas sirve para que no nos contagiemos, sirve para la prevención, pero no para callarnos. No entendemos cómo nos enteramos de un DNU ahora que este parlamento vuelve a funcionar. Queremos que deroguen el decreto y se discuta en el Congreso”.
Pasada la medianoche, y cerrada la histórica sesión que terminó con aplausos, el titular del Interbloque de Cambiemos Mario Negri en declaraciones a los medios dijo: “Hay que hacer funcionar las instituciones, para que sean contrapeso de la crisis. Debe haber servicio de justicia. Debe haber un Congreso funcionando en plenitud. ¿Por qué? Porque ya estamos en un estado de excepción en el cual cedimos libertades por el bien común” y finalmente agregó: “El Presidente conduce esta situación de transición por la peste del coronavirus, por eso debe ponerse por encima y no bajar al barro. Pero si decide bajar al barro, no podrá convocar a la unidad imprescindible para salir de esta crisis”.
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