Caracas. El indulto incluye a 110 presos, entre ellos 23 diputados opositores y cuatro suplentes. El ministro de Comunicación e Información de Venezuela, Jorge Rodríguez, aseguró que la medida fue adoptada: «en aras de promover la reconciliación nacional”. El líder de la oposición Juan Guaidó consideró que es una maniobra de Maduro para dividir la oposición. Hubo dirigentes internacionales como Bachelet y Borell, que calificaron de buena la medida chavista, pero desde del parlamento UE advirtieron que puede ser una trampa.
Según el ministro de Comunicación e Información del régimen, estos indultos buscan que los problemas de Venezuela se resuelvan internamente en el país, especialmente en las venideras elecciones parlamentarias, afirmó Rodríguez. Los indultados «tienen la oportunidad de participar en las elecciones» fijadas para el 6 de diciembre sin condiciones previas. El funcionario dejó en claro que son los directores de las cárceles los encargados de la ejecución del decreto presidencial una vez que sea publicado en la Gaceta Oficial.
Si bien desde el aparato de comunicación del chavismo se busca exponer que todos tienen derecho para ser o no candidato al Parlamento Nacional, y que no hay ningún tipo de condicionamiento en el establecimiento del Decreto y la participación o no en el evento electoral, pero la ministra para el Servicio Penitenciario, Iris Varela, se encargó de advertir que «el indulto es por los delitos pasados, no significa en modo alguno una patente para que no les caiga la justicia ante nuevas transgresiones».
Por su parte, Juan Guaidó, autodesignado presidente a cargo por la Asamblea Nacional, ha puesto en tela de juicio las intenciones de Maduro, al que acusa de estar tratando dividir a la oposición con el fin de dar legitimidad a los comicios de diciembre, que el reconocido como presidente encargado por buena parte de la comunidad internacional y el grueso de la oposición tienen intención de boicotear.
«El régimen liberó rehenes, y con ello reconoció una larga lista de presos y perseguidos políticos, prueba de que es una dictadura y del ataque contra la Asamblea Nacional», escribió en su Twitter, defendiendo que «jamás debieron pasar ni un solo segundo por ese infierno» e insistió las liberaciones buscan «tratar de legitimar las maniobras del momento», en este caso la «farsa» de las elecciones, «una farsa que está derrotada a nivel legal, político, popular e internacional», y Guaidó enfatizó: «Es una trampa y no vamos a caer».
En su mensaje Guaidó a enfatizó: «La puerta giratoria, en la que entran unos y salen otros, solo parará cuando salgamos de la dictadura», y estimó que la reconciliación solo será posible «con respeto a la Asamblea Nacional, la designación constitucional del Consejo Nacional Electdoral (CNE), restituir a los partidos e independencia de poderes» y volvió a insistir que: «Ese es el camino. Luchando juntos es como sacaremos de Miraflores al usurpador”.
Simultáneamente mientras el dictador Maduro anuncia liberación de presos políticos, fuerzas de seguridad chavistas han tomado el control de la sede del partido opositor Acción Democrática en el estado de Carabobo, en cumplimiento de la orden judicial que modificó la cúpula de esta formación y que su líder, Henry Ramos Allup, no reconoce.
La disputa se remonta a la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que descabezó a la cúpula de Acción Democrática para poner al frente a Bernabé Gutiérrez, considerado afín a las tesis chavistas, en un momento clave por el debate abierto sobre la participación en las elecciones parlamentarias de diciembre.
Sobre esta situación el titular de AD, Ramos Allup, denunció en su cuenta de Twitter esta irrupción, con los policías «escoltando un alacrán auto designado secretario general de AD en Carabobo». «Desalojan violentamente legítimas autoridades partidistas y amenazan con apresarlas».
Mientras tanto líderes internacionales como la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet ha señalado: «Valoro esta decisión como un paso significativo en los esfuerzos en favor de la apertura del espacio democrático y de la mejora de la situación de Derechos Humanos en el país». También, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, en la misma dirección manifestó: «La excarcelación de un considerable número de presos políticos y diputados perseguidos en Venezuela es una buena noticia».
Sin embargo desde el Parlamento de EU, en una intervención en la comisión de Asuntos Exteriores, la jefa de División de Sudamérica del Servicio de Acción Exterior, Veronique Lorenzo, admitió que comparte la preocupación expresada por varios eurodiputados de que la medida anunciada por Caracas sea una «maniobra estratégica para dividir a la oposición». «Somos conscientes de que se trata de un movimiento tramposo que está utilizando el régimen».
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