Tallin. La dirigente liberal Kaja Kallas se convertirá esta semana en la primera mujer al frente del Gobierno de Estonia, gracias a un pacto entre su formación política, el Partido de la Reforma y el Partido de Centro que encabeza el primer ministro saliente, Juri Ratas, que dimitió tras un escándalo de corrupción.
La Fiscalía investiga si el Partido de Centro y algunos de sus principales líderes se vieron implicados en el supuesto desvío de 39 millones de euros para ayudar en las obras de un proyecto inmobiliario y obtener así apoyo empresarial de cara a las próximas elecciones.
Ratas dimitió y, con él, todo el Gobierno, lo que ha abierto la puerta a Kallas. Ambos tienen previsto firmar este lunes el acuerdo para gobernar en coalición, con vistas a que después reciba el visto bueno del presidente, Kersti Kaljulaid, y pueda comenzar a trabajar el martes, según la televisión pública.
Ambas formaciones suman 59 de los 101 escaños del Parlamento, por lo que tienen garantizado el respaldo a un Gobierno que se acercará a la paridad en términos de género –seis de catorce puestos serán para mujeres–. La exministra de Exteriores Keit Pentus-Rosimannus se pondrá al frente de Finanzas, mientras que la embajadora Eva-Maria Liimets encabezará la diplomacia.
«Intenté lograr un equilibrio basándome en diferentes criterios», declaró Kallas el domingo, según la agencia BNS. «El equilibro de género es importante para mí, ya que hay mujeres muy capaces. También es importante un equilibrio en términos de experiencia», explicó, informa la agencia Bloomberg.
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