La crisis entre Estados Unidos y Rusia generada por el conflicto de Ucrania, la relación con China, la política exterior desplegada por la administración Fernández, y las implicancias del viaje del Presidente a Moscú y Beinging, fueron analizadas por el Dr. Mariano Caucino, analista de política internacional, ex embajador en Costa Ricas e Israel, en una entrevista efectuada por Natasha Niebieskikwiat para Clarín. VFN reproduce parcialmente la nota.
¿Usted evalúa oportuno el viaje de Alberto a Rusia y China? Hubo críticas por el «timming».
Debería ser algo positivo. Pero tal vez puede no ser el mejor momento. Más teniendo en cuenta que los sectores anti-occidentales del oficialismo creen ver la existencia de un bloque chino-ruso como opción sustitutiva a la relación con los EEUU. Esta cuarta administración kirchnerista se conduce por factores ideológicos.
Eso impone una limitación objetiva para un país mediano que necesita una política exterior al servicio de una estrategia de desarrollo. Además, el presidente viaja también en su condición de titular de la CELAC de modo que puede comprometer a otros países de la región en un momento complejo.
¿Qué debería hacer la Argentina? A menudo la critica es porque debería quedarse en un lugar, con los Estados Unidos y no mantener vínculos ni con Rusia y China…
Lo primero es recomponer la relación con nuestros vecinos. Este gobierno deterioró las relaciones con el Mercosur respecto a las que teníamos con Macri. Es inconcebible que en dos años no haya habido una cumbre presidencial con Brasil. Y ello a pesar del trabajo incansable del embajador (Daniel) Scioli. Pero un embajador no sustituye la falta de voluntad presidencial. Y el presidente argentino evidentemente no quiere hablar con el presidente brasileño.
Un intelectual argentino muy inteligente que vive en el exterior sostiene que hemos retrocedido a una instancia pre-westfaliana que pone la ideología por encima del interés nacional. Lo que en otro tiempo se conocía como la «razón de Estado». Un religioso como el cardenal Richelieu acordó con los hugonotes, Sadat y Begin firmaron la paz entre Egipto e Israel… y Fernández no puede tomar un café con Bolsonaro.. Es de locos.. ¿usted es consciente del primitivismo que eso significa?
¿Macri pudo mantener relaciones con las grandes potencias?
El presidente Macri comprendió que la Argentina tiene que tener las mejores relaciones económicas con todos pero nunca olvidó que somos parte de Occidente. Y que en el hemisferio americano existen compromisos de defensa de la democracia y los derechos humanos. Macri desplegó una combinación adecuada de realismo y defensa de valores.
¿A la larga, cree que el vínculo de Alberto Fernández es el mismo que los Kirchner a Rusia y China o cree es un vinculo atravesado por una necesidad ante la falta de un acuerdo con el FMI?
El error es creer que usted puede no arreglar con el FMI y que China y/o Rusia lo van a venir a rescatar. El propio embajador en Beijing, que suele ser criticado por tener posturas excesivamente pro-chinas, reconoció que es necesario algún arreglo de la deuda.
Vuelvo al tema Putin……. A menudo se lo tilda de dictador, de autócrata y de comunista. A la larga, ¿tiene eso algún peso? ¿Cómo definiría a Putin y a la Rusia de Putin?
Rusia nunca fue un país democrático. Rusia no atravesó -o al menos no lo hizo plenamente- experiencias fundamentales de la civilización occidental como el iluminismo, el renacimiento, la reforma o la separación de la Iglesia del Estado.
Putin es popular en Rusia mientras despierta inquietudes en Occidente. Acaso un fenómeno opuesto al de (Mikhail) Gorbachov, que es admirado en Occidente por haber terminado con los horrores del comunismo, pero es detestado en Rusia por haber liquidado un imperio por el cual el abnegado pueblo ruso luchó durante siglos.
El reportaje completo efectuado por Clárin, se puede leer en:
P/ag.cl.marianocaucino.vfn/gr.rp.