Kyiv – El asalto a Ucrania comenzó con tropas rusas que cruzaron la frontera o ingresaron por mar y aire el 24 de febrero. Pero los países occidentales dicen que sus expectativas de una victoria rápida y la destitución del gobierno del presidente Volodymyr Zelenskiy se han desvanecido y su fuerza de invasión se ha estancado.
Rusia ha invadido a Ucrania desde cuatro direcciones, enviando dos columnas hacia Kiev desde el noroeste y el noreste, avanzando desde el este cerca de la segunda ciudad más grande, Kharkiv, y extendiéndose hacia el sur desde Crimea. Funcionarios ucranianos han dicho que creen que Rusia se está quedando sin tropas para seguir luchando y pronto podría aceptar su fracaso en derrocar al gobierno ucraniano.
La guerra se ha desplegado con un patrón de destrucción y asedios a ciudades. Naciones Unidas dijo que 3,2 millones de civiles, en su mayoría mujeres y niños, han huido de Ucrania a países vecinos. Pero los rusos no han logrado capturar una ciudad importante frente a la enérgica resistencia de las fuerzas ucranianas. La inteligencia militar británica dijo en una actualización el jueves que la invasión se había «detenido en gran medida en todos los frentes» y que las fuerzas rusas estaban sufriendo grandes pérdidas.
Las acciones bélicas rusas sobre los suburbios del noreste y noroeste de Kiev provocaron graves daños, pero la propia capital se ha mantenido firme, bajo un toque de queda y sujeta a letales ataques nocturnos con cohetes. Un edificio en el distrito de Darnytsky de Kiev resultó gravemente dañado por lo que las autoridades dijeron que eran escombros de un misil derribado temprano en la mañana. Viacheslav Chaus, gobernador de la región centrada en la ciudad norteña de Chernihiv, dijo que 53 civiles habían muerto allí en las últimas 24 horas..
En la ciudad sitiada de Mariupol los equipos de rescate sacaron a los sobrevivientes, el jueves, de los escombros de un teatro. Ucrania dijo que había sido alcanzado por un ataque aéreo ruso mientras la gente se refugiaba allí de los bombardeos. Mariupol ha sufrido la peor catástrofe humanitaria de la guerra, con cientos de miles de civiles atrapados en sótanos sin comida, agua ni electricidad mientras las fuerzas rusas la golpean con fuego de artillería y ataques aéreos. Rusia negó atacar el teatro. Pero sus fuerzas han atacado ciudades y matado a muchos civiles en su invasión a Ucrania, que ahora entra en su cuarta semana.
Un asesor de la alcaldía de la ciudad, Petro Andrushchenko, dijo que se desconocía el número de víctimas del bombardeo al teatro el miércoles, pero que el refugio se había mantenido.» Ahora se están limpiando los escombros», y afirmó ya no. «Hay supervivientes». Imágenes satelitales comerciales mostraron que la palabra «niños» había sido marcada en el suelo frente al edificio antes de que fuera golpeado. El ayuntamiento de Mariupol dijo más tarde que más de 350.000 personas seguían refugiadas en la ciudad y 30.000 se habían ido.
Mientras tanto, se llevó a cabo un cuarto día consecutivo de conversaciones entre los negociadores rusos y ucranianos por enlace de video, pero los funcionarios occidentales dijeron que las dos partes se mantuvieron alejadas. «Ambas partes las están tomando las conversaciones en serio, pero hay una brecha muy, muy grande entre las posiciones en cuestión», dijo un funcionario. Un asistente de Zelenskiy señaló que Ucrania se apegaba a su posición central de retener la soberanía sobre las áreas ocupadas desde 2014 por las fuerzas rusas y prorrusas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha mostrado pocas señales de ceder, a pesar de que las sanciones punitivas occidentales están dañando la economía de su país. En un discurso televisado, arremetió contra los «traidores y la escoria» en casa que ayudaron a Occidente, y dijo que el pueblo ruso los escupirá como mosquitos. Kiev y sus aliados occidentales dicen que Rusia inició la guerra para subyugar a un vecino que Putin llama un estado artificial. Moscú dice que está llevando a cabo una «operación especial» para desarmar a Ucrania.
En el frente diplomático, la Casa Blanca dijo que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, mantendría una llamada el viernes con el líder chino, Xi Jinping, mientras Washington intenta persuadir a Beijing de que no brinde apoyo a Rusia. Por su parte Zelenskiy de Ucrania se dirigió al Bundestag alemán por enlace de video, sin escatimar esfuerzos en un discurso que invocó el Holocausto y el Muro de Berlín, y parecía tener la intención de avergonzar a los políticos prorrusos en Alemania, el principal comprador de energía de Moscú.
El presidente de Ucrania fue contundente en el Parlamento alemán: «Todos los años los políticos repiten ‘nunca más'», dijo Zelenskiy, quien es de ascendencia judía, citando un eslogan utilizado para conmemorar el Holocausto. «Y ahora vemos que estas palabras simplemente no tienen valor. En Europa, un pueblo está siendo destruido, están tratando de destruir todo lo que nos es querido, por lo que vivimos». Zelenskiy acusó a Alemania de ayudar a construir un nuevo muro «en medio de Europa entre la libertad y la falta de libertad», al aislar a Ucrania con sus lazos comerciales con Rusia y su anterior apoyo a Nord Stream 2, un gasoducto que desde entonces está congelado.
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