Kiev – Misiles rusos bombardearon la ciudad de Mykolaiv el jueves, dijeron funcionarios, después de que una resolución de la Asamblea General de la ONU calificara de «ilegal» la anexión de territorio ucraniano por parte de Moscú y los aliados de Ucrania comprometieran más ayuda militar.
«Se atacó un edificio residencial de cinco pisos, los dos pisos superiores quedaron completamente destruidos, el resto, bajo los escombros. Los rescatistas están trabajando en el sitio», dijo el alcalde de Mykolaiv, Oleksandr Senkevich, en una publicación en las redes sociales, y agregó que la ciudad sureña estaba «enormemente afectada». desgranado».
Un centro de construcción naval y un puerto en el río Southern Bug frente al Mar Negro, Mykolaiv ha sufrido fuertes bombardeos rusos durante la guerra. Rusia también atacó un asentamiento en la región de la capital de Ucrania, Kyiv, utilizando drones explosivos el jueves por la mañana, dijo la administración de la región en la aplicación de mensajería Telegram, aunque no hubo detalles sobre las víctimas.
El gobernador de la región de Kyiv, Oleksiy Kuleba, dijo, basándose en información preliminar, que los ataques fueron causados por municiones merodeadoras de fabricación iraní. Estos a menudo se conocen como ‘drones kamikaze’. Las instalaciones de infraestructura crítica fueron atacadas por los drones, dijo Kyrylo Tymoshenko, subjefe de la oficina presidencial de Volodymyr Zelenskiy.
En Nueva York, tres cuartas partes de los 193 miembros de la Asamblea General (143 países) votaron el miércoles a favor de una resolución que calificaba de ilegal la medida de Moscú, lo que profundizaba el aislamiento internacional de Rusia.
Solo cuatro países se unieron a Rusia para votar en contra de la resolución: Siria, Nicaragua, Corea del Norte y Bielorrusia. Treinta y cinco países se abstuvieron de votar, incluido el socio estratégico de Rusia, China, mientras que el resto no votó.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskiy, dijo en Twitter que estaba «agradecido con los 143 estados que apoyaron la resolución histórica de la Asamblea General de las Naciones Unidas… el intento (de Rusia) de anexión no tiene valor».
En Bruselas, más de 50 países occidentales se reunieron para prometer más ayuda militar a Ucrania, especialmente armas de defensa aérea, luego de fuertes ataques de represalia ordenados esta semana por el presidente ruso, Vladimir Putin, en respuesta a una explosión en un puente en Crimea.
Las promesas de los aliados incluyeron un anuncio de Francia de que entregaría sistemas de radar y defensa aérea a Ucrania en las próximas semanas. Gran Bretaña prometió misiles de defensa aérea y Canadá dijo que proporcionaría proyectiles de artillería entre otros suministros.
En la reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania en Bruselas, el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, dijo que los últimos ataques de Rusia pusieron al descubierto su «malicia y crueldad» desde que invadió Ucrania el 24 de febrero. Al menos 26 personas han muerto desde el lunes en ataques con misiles rusos. a través de Ucrania.
Ucrania había cambiado de impulso desde septiembre con avances extraordinarios, pero necesitaría más ayuda, dijo. «… Haremos todo lo posible para asegurarnos de que tengan lo necesario para ser efectivos», dijo Austin a los periodistas. Desde los ataques del lunes, Alemania envió el primero de cuatro sistemas de defensa aérea IRIS-T SLM, mientras que Washington dijo que aceleraría la entrega del prometido sistema de defensa aérea NASAMS.
Zelenskiy dijo que el aumento de la ayuda fortalecería la contraofensiva. “Mientras más ayuda reciba Ucrania ahora, más pronto pondremos fin a la guerra rusa”, dijo Zelenskiy por video en un foro durante las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en Washington.
Moscú proclamó en septiembre su anexión de cuatro regiones parcialmente ocupadas en Ucrania -Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporizhzhia- después de organizar lo que llamó referéndums. Ucrania y sus aliados han denunciado los votos como ilegales y coercitivos. La votación de la Asamblea General siguió a un veto de Rusia el mes pasado de una resolución similar en el Consejo de Seguridad de 15 miembros.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia, dijo a la Asamblea General antes de la votación que la resolución estaba «politizada y abiertamente provocativa», y agregó que «podría destruir todos los esfuerzos a favor de una solución diplomática a la crisis».
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