Con el apoyo clave de La Libertad Avanza, el kirchnerismo volvió a frustrar la intención del macrismo de avanzar con la ley de ficha limpia al fracasar por falta de quórum la sesión convocada en Diputados. La maniobra del Gobierno deja en la cuerda floja el acuerdo del oficialismo con el PRO que aspiraba a darle media sanción a la propuesta que podría poner en jaque una posible candidatura de Cristina Kirchner, ya que prohíbe la participación los condenados por corrupción en segunda instancia.
El oficialismo dio la sorpresa al dejar 8 bancas vacías, un gesto que confirma un acuerdo entre la Casa Rosada y el kirchnerismo para resignar el proyecto de ficha limpia a cambio de avanzar con la eliminación de las PASO. Sin embargo, en los pasillos del Congreso vincularon las ausencias con la necesidad de garantizar los votos para la continuidad de Martín Menem al frente de la Cámara.
Pero la jugada también puso al descubierto las tensiones entre la tribu libertaria y los aliados, cuando en la sesión en minoría hubo cruce, gritos, acusaciones y face to face entre los representantes de la Coalición Cívica y el oficialismo. También Encuentro Federal, el bloque de Miguel Angel Pichetto, y los radicales de Rodrigo de Loredo acusando fuerte al Gobierno.
Pero en principio hay que señalar que al PRO, el bloque que comanda Cristian Ritondo, y principal impulsor de la propuesta no pudo garantizar asistencia perfecta. Si bien recuperó a Alejandro Finocchiaro, que había faltado en la anterior fallida sesión, le volvió a faltar José Núñez, que al parecer tampoco pudo llegar a tiempo este jueves, y se sumó Gabriel Chumpitaz. Además volvió a faltar Aníbal Tortoriello por problemas de salud.
Las versiones en el Palacio Legislativo estuvieron a la orden del día. La oposición más filosa puso en duda que toda la bancada que responde a Mauricio Macri haya estado de acuerdo con apoyar la propuesta. Sin embargo, en el recinto quedó la imagen al borde de estallar de la bronca de Silvia Lospennato, hasta aquí una de las alfiles del macrismo y pieza clave para el oficialismo en proyectos del Gobierno. «Los corruptos y los terroristas deben estar festejando», dijo la diputada en su mensaje advirtiendo que tiene la lista de los legisladores que habían comprometido su presencia.
Habrá que ver si dentro de esa lista estaban los nombres de los 8 diputados de La Libertad Avanza Pablo Ansaloni, Santiago Santurio, Alvaro Martínez, Lorena Macyszyn, Carolina Píparo, Emilia Orozco, Marcela Pagano (atraviesa las últimas semanas de su embarazo) y José Peluc. Tampoco estuvo la aliada del oficialismo Lourdes Arrieta, que si participó en la primera sesión fallida y en esta oportunidad no bajó al recinto para dar quórum pero si para el debate en minoría, donde dio un llamativo discurso entre lágrimas para justificarse y remarcar que no significa que es «enemiga del pueblo».
Está claro que la decisión del oficialismo estuvo atada al apoyo del kirchnerismo no sólo a la propuesta enviada por el Gobierno para eliminar las primarias que el Gobierno quiere incluir en el temario si convoca a sesiones extraordinarias sino también porque Martín Menem se quiere asegurar los votos para su continuidad en la presidencia de la Cámara cuando el próximo miércoles 4 de diciembre se haga la sesión preparatoria para renovar las autoridades.
Es comentada la situación que se vivió esta semana en la Cámara baja, cuando Germán Martínez, jefe del bloque de Unión por la Patria, le advirtió a Menem que si insistían con el proyecto del PRO que se olvide de ser reelecto como presidente del cuerpo. Sin el apoyo del peronismo sumado el descontento de los aliados por los acuerdos incumplidos, la continuidad del riojano al frente del cuerpo estaba en duda.
En el bloque de la UCR, que había tenido asistencia perfecta en la sesión fallida de la semana pasada, le faltaron dos diputados. Se trata de José Tournier, uno de los 5 radicales que viene votando religiosamente con el oficialismo, y Natalia Sarapura, que está alineada con el gobernador de Jujuy, Carlos Sadir, quien también bajó a Carlos Rizzotti de Democracia para Siempre. En el bloque responde a Facundo Manes y Martín Lousteau también se notó la ausencia de Mariela Coletta.
En el caso de Encuentro Federal hubo 6 ausencias. Dos llamaron la atención, fue la de Miguel Angel Pichetto y Nicolás Massot, que estuvieron en el primer intento. Massot denunció en la redes un acuerdo entre el oficialismo y los K para garantizar la continuidad de Menem a cambio de la candidatura de Cristina Kirchner «con ficha limpia como pantalla». A ellos se sumaron los 8 de Innovación Federal, que ya habían faltado la semana pasada al igual que los tres diputados de Tucumán que responden al gobernador Osvaldo Jaldo. En este caso, la presencia de esta bancada estaba atada al avance de la negociación por el presupuesto.
Tras caerse la sesión por falta de quórum se pasó al debate en minoría y la impulsora de la propuesta, la macrista Silvia Lospenanato cargó duro contra los diputados al afirmar que «esta sesión se cayó porque la impunidad es muy poderosa en Argentina».
«No nos comemos más el verso, no creemos en las casualidades ni en los imprevistos», dijo la legislatora, quien aseguró tener por escrito quienes iban a asistir.
P/ag. Agencias.cl.gb/gr.