Gaza-El Cairo-Jerusalen. En Tel Aviv, cientos de israelíes congregados en una plaza frente a la sede de la defensa vieron una transmisión en vivo desde Gaza que mostraba la liberación de los rehenes en una pantalla gigante. La multitud vitoreó, se abrazó y lloró cuando se vio a tres rehenes subiendo a un vehículo de la Cruz Roja rodeadas de terroristas armados de Hamás.
Poco después, el ejército israelí dijo que Romi Gonen, Doron Steinbrecher y Emily Damari se habían reunido con sus madres en un punto de encuentro dentro de Israel, cerca del kibutz y del festival de música cercano donde habían sido secuestradas en la incursión terrorista de Hamas del 7 de octubre de 2023 que precipitó la guerra.
En Cisjordania ocupada por Israel, los autobuses esperaban la liberación de prisioneros palestinos detenidos por Israel. Hamás dijo que el primer grupo que sería liberado a cambio de los rehenes incluye a 69 mujeres y 21 adolescentes.
La primera fase de la tregua en la guerra de 15 meses entre Israel y Hamás entró en vigor tras un retraso de tres horas durante el cual los aviones de guerra y la artillería israelíes bombardearon la Franja de Gaza.
Israel culpó a Hamás por demorarse en entregar los nombres de los rehenes que liberaría y dijo que había atacado a terroristas. Hamás dijo que el retraso en la entrega de la lista se debió a un fallo técnico.
«Hoy las armas en Gaza se han silenciado», dijo el presidente estadounidense, Joe Biden, en su último día completo en el cargo, dando la bienvenida a una tregua que había eludido a la diplomacia estadounidense durante más de un año.
«El camino hacia este acuerdo no ha sido nada fácil, ha sido un largo camino», dijo Biden. «Pero hemos llegado a este punto hoy debido a la presión que Israel ejerció sobre Hamás, con el apoyo de Estados Unidos».
La tregua exige que cesen los combates, que se envíe ayuda a Gaza y que 33 de los 98 rehenes israelíes y extranjeros que aún se encuentran retenidos allí sean liberados durante la primera fase de seis semanas a cambio de cientos de prisioneros palestinos detenidos en cárceles israelíes.
Para Hamás, la tregua podría ser una oportunidad para salir de las sombras después de 15 meses de ocultación. Policías de Hamás vestidos con uniformes azules se desplegaron rápidamente en algunas zonas.
La gente que se había reunido para vitorear a los combatientes coreaba «Saludos a las Brigadas Al-Qassam», el brazo armado del grupo.
«Todas las facciones de la resistencia se quedan a pesar de (el primer ministro israelí) Netanyahu», dijo un combatiente a Reuters. «Este es un alto el fuego, completo y exhaustivo si Dios quiere, y no habrá vuelta a la guerra a pesar de él».
El acuerdo de alto el fuego es el resultado de meses de negociaciones intermitentes negociadas entre Egipto, Qatar y Estados Unidos, y entra en vigor en vísperas de la investidura del presidente electo estadounidense Donald Trump, , quien había dicho que se desataría un «infierno» a menos que los rehenes fueran liberados antes de que asumiera el cargo.
No existe un plan detallado para gobernar Gaza después de la guerra, y mucho menos para reconstruirla. Cualquier retorno de Hamás al control de Gaza pondrá a prueba el compromiso con la tregua de Israel, que ha dicho que reanudará la guerra a menos que se desmantele por completo al grupo terrorista que ha gobernado el enclave desde 2007.
El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, de línea dura, renunció al gabinete el domingo debido al alto el fuego, aunque su partido dijo que no intentaría derrocar al gobierno de Netanyahu. El otro ministro de Finanzas más destacado, Bezalel Smotrich, permaneció en el gobierno por ahora, pero dijo que renunciaría si la guerra termina sin que Hamás sea completamente destruido.
El asesor de seguridad nacional designado de Trump, Mike Waltz, dijo que si Hamás incumple el acuerdo, Estados Unidos apoyará a Israel «en hacer lo que tiene que hacer».
«Hamás nunca gobernará Gaza. Eso es completamente inaceptable».
Las calles de la devastada Ciudad de Gaza, en el norte del territorio, ya estaban repletas de grupos de personas que ondeaban la bandera palestina y filmaban la escena con sus teléfonos móviles. Varios carros cargados con pertenencias domésticas circulaban por una vía llena de escombros.
Largas filas de camiones cargados de combustible y suministros de ayuda se formaron en los pasos fronterizos en las horas previas a la entrada en vigor del alto el fuego. El Programa Mundial de Alimentos dijo que los camiones comenzaron a cruzar el domingo por la mañana.
El acuerdo exige que se permita el ingreso de 600 camiones de ayuda humanitaria a Gaza cada día durante las seis semanas iniciales de alto el fuego, incluidos 50 que transportarán combustible. La mitad de los 600 camiones de ayuda humanitaria se entregarían en el norte de Gaza, donde los expertos han advertido de que la hambruna es inminente.
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