Gaza-Jerusalén-El Cairo. El grupo terrorista palestino Hamas entregó el sábado a tres rehenes israelíes cuyo aspecto demacrado conmocionó a los israelíes, e Israel comenzó a liberar a decenas de palestinos en la última etapa de un alto el fuego destinado a poner fin a la guerra en Gaza.
Ohad Ben Ami y Eli Sharabi, que fueron tomados como rehenes en el kibutz Be’eri durante el ataque liderado por Hamás al sur de Israel el 7 de octubre de 2023, y Or Levy, que fue secuestrado ese día en el festival de música Nova, fueron conducidos a un podio de Hamás por hombres armados.
Los tres hombres parecían delgados, débiles y pálidos, en peores condiciones que los otros 18 rehenes ya liberados bajo la tregua acordada en enero después de 15 meses de guerra.
«Parecía un esqueleto, era horrible verlo», dijo la suegra de Ohad Ben Ami, Michal Cohen, al Canal 13 News mientras observaba la ceremonia de entrega dirigida por Hamas, que incluyó a los rehenes respondiendo preguntas formuladas por un hombre enmascarado mientras militantes armados con rifles automáticos estaban de cada lado.
En otra demostración de fuerza por parte de Hamás, que ha hecho desfilar a combatientes durante liberaciones anteriores, docenas de sus militantes se desplegaron en el centro de Gaza mientras entregaban rehenes al Comité Internacional de la Cruz Roja.
Los rehenes fueron trasladados en vehículos del CICR hasta las instalaciones de las fuerzas israelíes y luego a Israel, donde se reunieron con sus familiares y volaron a hospitales. «Te extrañamos mucho», dijo la madre de Or Levy, Geula, mientras abrazaba a su hijo.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que la visión de los frágiles rehenes era impactante y que se abordaría el problema.
El presidente israelí, Isaac Herzog, calificó la ceremonia de liberación de cínica y cruel. «Esto es lo que parece un crimen contra la humanidad», afirmó.
El Foro de Familias de Rehenes dijo que las imágenes de los rehenes evocaban imágenes de sobrevivientes de los campos de concentración nazis durante el Holocausto. «Tenemos que sacar a TODOS LOS REHENES del infierno», dijo.
A cambio de la liberación de los rehenes, Israel liberaba a 183 prisioneros palestinos, algunos de ellos condenados por participar en ataques que mataron a docenas de personas, así como a 111 detenidos en Gaza durante la guerra.
Multitudes entusiastas recibieron a los autobuses cuando llegaron a Gaza, abrazando a los detenidos liberados, algunos de ellos llorando de alegría y arrancándose de las muñecas las pulseras que les había entregado la prisión.
Entre los liberados en Ramallah, en Cisjordania ocupada por Israel, se encontraba Eyad Abu Shkaidem, condenado a 18 cadenas perpetuas en Israel por planear ataques suicidas en venganza por los asesinatos de líderes de Hamas cometidos por Israel en 2004.
«Hoy he renacido», dijo Shkaidem a los periodistas mientras la multitud aplaudía.
El servicio médico de la Media Luna Roja Palestina indicó que seis de los 42 presos liberados en Cisjordania se encontraban en mal estado de salud y fueron trasladados al hospital. Algunos presos se quejaron de malos tratos. «La ocupación nos humilló durante más de un año», afirmó Shkaidem.
Algunos rehenes se enfrentan a un doloroso retorno. Las dos hijas adolescentes de Sharabi y su esposa, nacida en Gran Bretaña, fueron asesinadas en el ataque de Hamas al kibutz Be’eri, donde murió uno de cada diez residentes.
El Canal 12 de Israel dijo que Sharabi no había sido informado sobre sus muertes y preguntó dónde estaban cuando llegó.
Levy se reencontrará con su hijo de tres años. Su esposa murió en el ataque.
La doctora Hagar Mizrachi, del Hospital Ichilov de Israel, dijo que los rehenes presentaban una grave pérdida de peso y desnutrición.
Hasta el momento se han liberado dieciséis rehenes israelíes y cinco tailandeses y se ha puesto en libertad a 583 prisioneros y detenidos palestinos.
La primera fase de 42 días del alto el fuego, mediada por Washington, El Cairo y Doha, se ha mantenido en gran medida desde que entró en vigor el 19 de enero.
Netanyahu envió una delegación para mantener conversaciones en Doha el sábado, informó el Canal 12 de Israel, citando una fuente política.
La preocupación de que el acuerdo pueda colapsar antes de que los 76 rehenes restantes sean liberados ha crecido desde el sorprendente llamado del presidente Donald Trump, para que los palestinos sean traladados de Gaza y para que el enclave sea entregado a los Estados Unidos y se convierta en la «Riviera del Medio Oriente».
Los estados árabes y los grupos palestinos han rechazado la propuesta de Trump, que según los críticos equivaldría a una limpieza étnica. Hamas dijo el sábado que su exhibición armada en la entrega de rehenes demostró que no podía ser excluido de los acuerdos posguerra en Gaza.
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