En un ir y venir de versiones contradictorias por parte del gobierno de Tierra del Fuego, este jueves tomó estado parlamentario en la Legislatura de la provincia un acuerdo con una empresa estatal china cuyo contenido ya venía generando polémica desde el año pasado. El memorándum, que se conoce ahora, incluye la construcción en la ciudad de Río Grande de un puerto y una central eléctrica más la producción a gran escala de químicos.
Luego de que trascendieron detalles del proyecto, la oposición salió a pedir más información y prepara una denuncia penal en la Justicia.
El gobernador de la provincia Gustavo Melella les solicitó a los legisladores provinciales que le ratifiquen el memorándum de entendimiento que firmó con China en octubre del año pasado a través de un decreto en el que dio a conocer todos los detalles del polémico acuerdo.
En el documento se establece que la empresa Shaanxi Chemical Group invertirá US$ 1.250 millones en la provincia para la construcción de una planta industrial con una capacidad anual de 600.000 toneladas de amoníaco sintético, 900.000 toneladas de urea y 100.000 toneladas de glifosato.
Ello implicará la construcción de una terminal portuaria multipropósito con recinto interno, para el amarre de de embarcaciones de 20.000 toneladas, es decir un puerto chino en Argentina, y una central eléctrica de 100MW.
Lo increíble de todo esto es que por una parte, Melella envió el proyecto de ratificación de su proyecto a la Legislatura provincial cuando Sergio Massa, con los diputados Máximo Kirchner y Cecilia Moreau estaban de viaje en China. Y por otra parte, es uno de los proyectos que Estados Unidos más objeta en cuanto al avance chino en América Latina y Argentina en proyectos logísticos y de infraestructura claves.
Para el caso, Melella, un radical aliado al kirchnerismo y recientemente reelecto, habló de ello con el embajador Marc Stanley cuando visitó la provincia en enero pasado.
En el entorno del ministro de Economía, Sergio Massa, dijeron que iba a llamar esta tarde a Melella para saber qué busca con el pedido de ratificación del memorándum, que data de diciembre de 2022.
En el Gobierno nacional habían descartado «la terminal portuaria» china en Tierra del Fuego, una información que además se confundía con otra intención de China, que es la de participar con capitales en la construcción de una base en el Polo Logístico que Argentina añora construir en Ushuaia. Sin embargo de eso sí no hay documentos firmados, al menos por ahora.
En su momento Melella negó que se construyera una base china y lo atribuyó a una operación de «embajadas».
En diálogo con este diario, el senador por Tierra del Fuego Pablo Blanco, de Juntos por el Cambio, y quien junto a otros legisladores de la oposición como Fernando Iglesias y Mariana Zuvic objetaron estos contenidos, dijo que la provincia «no tiene la facultad de decidir en cuestiones de vías navegables y menos en lugares estratégicos. Y espero que la Legislatura cuando lo trate lo deje bien claro».
Qué más dice el acuerdo
Siendo la empresa una «Parte» y la provincia otra «Parte», el documento recuerda que todo lo que se está acordando es en el marco del aniversario 50 del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Argentina y China y que la cooperación recíproca «ha entrado a una nueva etapa».
En ese sentido recuerda que «los gobiernos de ambos países firmaron un memorando de entendimiento sobre la construcción conjunta en el marco de la iniciativa «Una Franja una Ruta», a la que Argentina se adhirió oficialmente en febrero de 2022. «Los gobiernos de ambos países apoyan a las empresas de ambas partes a profundizar la cooperación recíproca y a abrir nuevas oportunidades».
Dice que Tierra del Fuego «es rica en recursos de gas natural y es una de las nuevas potencias industriales de Argentina». Y que Shaanxi Chemical Gropu es una «subsidiaria de propiedad total de Cow Ltd.». Es la empresa de producción química más grande de la provincia Shaanxi. Y «se dedica principalmente a la producción y la investigación científica de productos químicos, con un valor de producción anual de 50 mil millones de yuanes.»
Además de que van a producir «energía» y «agroquímicos», que una vez puesta en marcha la producción «será preferentemente suministrada al mercado interno, sustituyendo las importaciones y ahorrando divisas; al mismo tiempo, imprimiendo más valor agregado al gas natural extraído, generando nuevos empleos y promoviendo el empleo».
Al mismo tiempo, el puerto y la central eléctrica servirán para cubrir las necesidades locales además de abastecer al propio proyecto». No deja establecido qué gana Shaanxi. Dice: «La construcción sin contratiempos del proyecto será ejemplar para la inversión de empresas chinas en el sur de Argentina».
Habría primero un Grupo de Trabajo divido en grupo. Y luego establece como compromiso de la provincia lo siguiente:
«Completar las aprobaciones del proyecto a la mayor brevedad, con sujeción a las disposiciones legales vigentes y futuras»; coordinar a cada una de las partes involucradas «creando un entorno favorable para la construcción del proyecto y garantizando su adecuada implementación».
Dice que el proyecto de inversión «será beneficiario de las políticas fiscales preferenciales de Tierra del Fuego» de conformidad con la normativa vigente, y «recibirá asistencia para la solicitud ante el Gobierno Argentino de otras políticas preferenciales pertinentes, con coordinación a cargo de la Secretaría de Promoción Económica y Financiera de Argentina».
Shaanxi se compromete, según el documento a «impulsar activamente a las empresas chinas a invertir en Tierra del Fuego, sumar a la fortaleza en materia científica y tecnológica, esforzarse por aumentar el valor agregado de los recursos energéticos locales, contribuyendo al desarrollo económico de Tierra del Fuego.»
Habla de implementar «una nueva filosofía corporativa de protección ambiental, salud y seguridad» y de «darle a la población local tantos puestos de trabajo como sea posible, capacitar talentos locales en la parte técnica, mejorar el nivel técnico local, fortalecer la cooperación con las empresas locales»
La modificación del presente Memorandum de Entendimiento requiere ser formalizada «mediante documentos firmados por representantes autorizados de ambas partes». Entrará en valor después de sus suscripción y tendrá vigencia por tres años a partir de la firma y se renovará por el mismo período de tiempo si ninguna parte lo objeta con treinta días de anticipación.
P/ag.clnsn.ifb.agencias/gr.
