Camberra – El primer ministro de Australia dijo el viernes después de una reunión con su homóloga de Nueva Zelanda que las dos naciones están unidas en sus políticas hacia las islas del Pacífico, donde la influencia de China está creciendo.
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, se convirtió en la primera líder extranjera en visitar al primer ministro Anthony Albanese en Australia desde que fue elegido el 21 de mayo. Tanto las administraciones principales de centroizquierda como Ardern describieron la elección del Partido Laborista Albanese después de casi una década en la oposición como un reinicio. en la relación bilateral.
Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos han expresado su preocupación de que un nuevo pacto de seguridad de Beijing con las Islas Salomón podría resultar en el establecimiento de una base militar china allí. Tanto las Islas Salomón como China han negado que eso suceda.
Cuando se le preguntó si Australia quiere que Nueva Zelanda haga más para contrarrestar el ascenso de China en el Pacífico, Albanese dijo a los periodistas en Sydney: «Estamos al mismo paso en el Pacífico». “Espero trabajar con la primera ministra Ardern, trabajar con nuestros vecinos democráticos”, dijo Albanese.
Albanese y su ministra de Relaciones Exteriores, Penny Wong, volaron a Tokio pocas horas después de asumir el cargo para reunirse con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, y el primer ministro indio, Narendra Modi, para discutir la amenaza a la seguridad regional que representa China.
Luego, Wong voló desde Japón a las islas del Pacífico para reunirse con los líderes gubernamentales, mientras que el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, también se embarcó en una gira por el Pacífico.
Wang fracasó en un audaz plan chino para lograr que 10 naciones del Pacífico respaldaran un nuevo acuerdo amplio que habría cubierto todo, desde la seguridad hasta la pesca. Pero logró cerrar varios acuerdos bilaterales.
Ardern dijo que muchos países habían optado por continuar las relaciones económicas con China en lugar de firmar acuerdos de seguridad. “Escuchemos al Pacífico sobre estos temas”, dijo Ardern.
Albanese dijo que Australia, el mayor donante de ayuda exterior en la región, estaba siendo tomado en serio por sus vecinos desde que su administración prometió una mayor acción sobre las emisiones de gases de efecto invernadero. Muchas de las islas bajas del Pacífico consideran que el cambio climático es su amenaza más apremiante y existencial.
El gobierno anterior se había comprometido a reducir las emisiones de Australia entre un 26 % y un 28 % por debajo de los niveles de 2005 para 2030. El gobierno de Albanese ha prometido una reducción del 43 %.
Nueva Zelanda se sintió alentada por la mayor ambición de Australia, dijo Ardern. El objetivo de Nueva Zelanda para finales de la década es del 30%. “La región del Pacífico ha incluido el cambio climático como su amenaza número uno”, dijo Ardern. «Sé que con respecto a Nueva Zelanda tenemos mucho más por hacer, pero agradecemos que Australia nos acompañe en ese viaje».
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