La desaparición del ministro de Defensa chino, Li Shangfu, pone de relieve la naturaleza opaca y compleja del Ejército Popular de Liberación (EPL), dicen diplomáticos y analistas.
Reuters informó el viernes que Li está bajo investigación por la adquisición corrupta de equipo militar durante su cargo anterior. Otros ocho altos funcionarios también están siendo investigados. Su suerte no ha sido explicada oficialmente.
En el sistema chino, el Ministro de Defensa Nacional es visto como significativamente menos poderoso que el Secretario de Defensa estadounidense y muchos equivalentes internacionales.
El puesto es esencialmente una función diplomática y ceremonial sin una función de mando directo.
Aun así, Li se encuentra entre los seis oficiales militares bajo el mando del Comandante en Jefe y Presidente Xi Jinping en la Comisión Militar Central (CMC) y es uno de los cinco Consejeros de Estado, un puesto que supera en rango a un ministro regular del gabinete.
Li, un ingeniero aeroespacial que trabajó en el programa de satélites de China, era visto como un tecnócrata que ayudó a implementar la visión de modernización de Xi para el EPL, dicen agregados militares y analistas.
El EPL es el brazo armado del gobernante Partido Comunista y, según el informe anual del Pentágono sobre el ejército chino, «no sirve directamente al Estado sino que está bajo el control directo del partido».
A medida que Li ascendía en su carrera hasta este punto, habría sido examinado para garantizar que era absolutamente leal al partido y a Xi.
En el EPL todavía opera un cuadro activo de comisarios políticos que flanquean la cadena de mando, con la tarea de garantizar la lealtad, la unidad y la moral. El sistema de comisarios no tiene equivalentes claros fuera de los ejércitos comunistas tradicionales.
Mientras tanto, el CMC es el órgano de toma de decisiones de más alto nivel del partido en asuntos militares.
«Desde que asumió como presidente del CMC, Xi Jinping ha implementado múltiples reformas que reducen la autonomía del EPL y fortalecen en gran medida el control del Partido sobre el ejército», señala el informe del Pentágono, publicado en noviembre de 2022.
Eso añade una capa adicional de opacidad más allá del secreto militar rutinario, según los agregados de defensa extranjeros que examinan al EPL.
Con seguridad El EPL ya es la fuerza de combate más grande del mundo y está cada vez más capaz y modernizado. A medida que absorbe nuevas armas, su sistema también está cambiando, con la creación en los últimos años de nuevos comandos regionales unificados y una Fuerza de Apoyo Estratégico para cubrir sus capacidades de guerra espacial y cibernética, un organismo del que Li fue subcomandante en 2016.
A medida que el poder y el alcance del EPL se expanden, los ejércitos extranjeros están ansiosos por aprender más sobre cómo funciona y las intenciones estratégicas de sus líderes, esfuerzos que sustentan la relación entre militares y la diplomacia.
La desaparición de Li ha generado preocupación entre algunos diplomáticos y analistas de que el alcance militar chino esté siendo superado por una represión de seguridad interna.
Los jefes de defensa estadounidenses están ansiosos por restablecer las comunicaciones de rutina con sus homólogos chinos en medio de tensiones regionales.
Li, quien fue sancionado por Estados Unidos en 2018 por la compra de armas rusas, evitó conversaciones formales con el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, en Singapur en junio.
Después de las conversaciones del fin de semana entre el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, en Malta, funcionarios estadounidenses dijeron que habían notado señales «limitadas» de que el enfriamiento de las comunicaciones podría aliviarse.
Incluso si China anuncia un nuevo ministro de Defensa y le permite reunirse con Austin, algunos analistas dicen que una figura de mayor rango, como el vicepresidente del CMC y aliado cercano de Xi, Zhang Youxia, sería una figura en pie de igualdad.
Dada la agitación, ahora se sigue de cerca una conferencia internacional sobre seguridad que Li debía organizar en octubre.
s Si Li no aparece en el próximo Foro de Xiangshan, el mayor evento de extensión de la diplomacia de defensa de Beijing, podría significar que todavía está detenido para ser investigado.
Los diplomáticos dicen que China celebrará el foro en la segunda mitad del próximo mes, pero no ha enviado invitaciones, algo tarde para los estándares chinos.
Considerado como la versión de Beijing del Diálogo Shangri La, el Foro Xiangshan es una conferencia de alto nivel a través de la cual China intenta dar forma a las discusiones globales sobre cuestiones de defensa y seguridad.
La última vez que el foro se celebró en persona en 2019, asistieron más de 530 funcionarios y académicos militares y de defensa, incluidos ministros de defensa de 23 países.
El ministro de Defensa chino normalmente daría el discurso de apertura en el foro y se reuniría con las delegaciones.
INT/ag.agencias.europapress/rp.
