Jerusalén. Dos terroristas armados de Hamas mataron a tres personas en una parada de autobús en Jerusalén durante la hora pico de la mañana del jueves, e Israel reiteró su compromiso de eliminar a la facción terrorista islamista palestina, cuya matanza del 7 de octubre desencadenó la guerra de Gaza.
Los terroristas palestinos en Jerusalén Este, fueron eliminados a tiros por soldados fuera de servicio y un civil armado, dijo la policía. Al menos ocho personas también resultaron heridas en el tiroteo.
«Los terroristas llegaron al lugar en coche por la mañana, armados con un rifle M-16 y una pistola», dijo la policía. «Los terroristas comenzaron a disparar contra civiles antes de ser eliminados s en el lugar».
Las imágenes de las cámaras de seguridad obtenidas por Reuters muestran un coche blanco deteniéndose junto a la concurrida parada de autobús. Luego salen dos hombres, con las armas en la mano, y cargan contra la multitud mientras la gente se dispersa. Poco después, los atacantes palestinos son eliminados.
Un gran número de socorristas y fuerzas de seguridad convergieron en la zona que estaba abarrotada de viajeros matutinos. Las víctimas asesinadas fueron identificadas por los medios israelíes como una mujer de unos 20 años, una mujer de unos 60 años y un rabino de 74 años.
La agencia de seguridad Shin Bet de Israel identificó a los terroristas como hermanos de 30 y 38 años afiliados a Hamas, que gobierna Gaza. Ambos habían estado previamente encarcelados en Israel.
«Es el mismo Hamás que llevó a cabo la horrible masacre del 7 de octubre, el mismo Hamás que intenta asesinarnos en todas partes», dijo Netanyahu, poco después de reunirse con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en Jerusalén. «Le dije (a Blinken): ‘Juramos, yo juré, erradicar a Hamás. Nada nos detendrá'».
Hamás, que ha jurado destruir a Israel, reivindicó el ataque a Jerusalén, calificándolo de «heroico».
«La operación surgió como una respuesta natural a crímenes sin precedentes llevados a cabo por la ocupación (Israel)», dijo en un comunicado, citando la ofensiva militar en Gaza y el trato a los prisioneros palestinos en las cárceles israelíes.
El ministro de policía de extrema derecha de Israel, Itamar Ben-Gvir, dijo a los periodistas en el lugar del ataque que «demuestra una vez más que no debemos mostrar debilidad, que debemos hablar con Hamás sólo a través de la mira (del rifle), sólo a través de la guerra.»
Añadió que Israel continuaría con su política de flexibilizar las regulaciones para la emisión de licencias de armas a ciudadanos privados.
Blinken, en su tercera visita a la región desde que estalló la guerra, dijo que el tiroteo del jueves fue un recordatorio «de la amenaza del terrorismo que Israel y los israelíes enfrentan todos los días… Mi corazón está con las víctimas de este ataque».
Por otra parte, en la ocupada Cisjordania, el ejército israelí dijo que dos soldados resultaron heridos en un ataque con un coche en un puesto de control. Las tropas en el lugar «dispararon y neutralizaron al agresor», dijo. No hubo comentarios palestinos inmediatos.
La violencia se produjo cuando Israel y Hamas llegaron a un acuerdo de último minuto el jueves para extender un día más su alto el fuego de seis días en Gaza para permitir a los negociadores seguir trabajando en acuerdos para intercambiar rehenes retenidos en el enclave por prisioneros palestinos.
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