El Frente Cambia Mendoza fue integrado con la participación de la UCR, el PRO, el Partido Demócrata, el massimo local y Libres del Sur. La gestión, dentro de esta heterogénea alianza, exige un delicado equilibrio de poder, que el PD intenta poner a prueba con su decisión de alejarse. Sin embargo, el PD enfrenta ahora el riesgo de una fractura interna, ya que numerosos dirigentes con cargos partidarios y electorales han rechazado la medida de las autoridades partidarias.
La ruptura con el Frente Cambia Mendoza, fue oficialmente informada por Roberto Ajo, Presidente del PD, en un extenso comunicado en el que se detallaron las discrepancias que causaron el abandono del Frente. Según consideran en el PD sus votos fueron decisivos para el triunfo en el 2019, pero señalan que la alianza se convirtió en un simple acuerdo electoral, ya que los el PD nunca fue convocado para participar en la toma de decisiones en la administración del gobernador Rodolfo Suárez.
Se señala, también en el comunicado, que las diferencias no solamente se manifiestan en el plano político institucional con relación a la división de poderes, la defensa de la república y de la austeridad, sino que advierten que abarcan incluso a las ideas económicas. Pero en uno de los párrafos surge lo que parece ser el eje de la discordia, la posibilidad de avanzar con la reforma de la constitución provincial.
Para el PD, “el gobernador, sin debatirlo previamente en el seno de la alianza, ha remitido a la Legislatura un proyecto de reforma constitucional que, bajo el falso argumento de la disminución del costo legislativo (hay varias iniciativas nuestras que implican una drástica reducción del gasto político sin necesidad de una costosa asamblea constituyente), entraña y redunda en una mayor concentración de facultades en el poder ejecutivo, un debilitamiento de las minorías y la posible desaparición de las terceras fuerzas, como ha sucedido en las provincias donde se han aplicado reformas similares.”
La Junta Central del PD advierte que frente a este escenario, decidió ponerse la «Camiseta propia del PD en las próximas elecciones legislativas y de constituyentes para poder sostener en libertad nuestros principios y convicciones, y jugar fuerte para la Mendoza que nos merecemos», concluye el comunicado.
La reacción interna no se hizo esperar. El diputado provincial del Partido Demócrata Guillermo Mosso se expresó en contra de abandonar el frente “Cambia Mendoza” y sostuvo que el PD ha logrado subsistir gracias a ser parte de una alianza política. En declaraciones a radio Mitre Mendoza el legislador remarcó: “Creemos que ninguna construcción política puede disminuir su peso o caudal electoral contra el kirchnerismo”.
En un documento, que expresa el pensamiento de los dirigentes disidentes con la decisión de la Junta Central se señala: “La decisión que se adoptó fue tomada al impulso de la dirigencia que hace más de dos décadas maneja inconsultamente el partido, sin evaluaciones previas de lo que piensa la sociedad mendocina, solo guiados por el pálpito y las corazonadas. Como también lo viene haciendo con alianzas electorales con partidos y figuras que ya cumplieron su ciclo y no generan entusiasmo ni expectativas en la ciudadanía.”
Se señala también: “Reivindicamos nuestra pertenencia al Frente Cambia Mendoza, con vocación de gobierno -no solo electoral- y la necesidad de rediscutir condiciones de permanencia, programas de gobierno y políticas públicas y además solicitaremos la convocatoria de la Convención Provincial, organismo máximo del partido y el único habilitado a tomar decisiones de esta transcendencia.” El documento lleva la firma de 14 dirigentes, algunos de ellos en ejercicio de cargos electivos.
Desde la UCR, partido que lidera la coalición, su titular e intendente de Godoy Cruz, Tadeo García Zalazar, se pronunció al respecto: “La construcción de un espacio republicano para luchar contra el populismo es una carrera de largo plazo, no es apta para experimentos electoralistas. Quien quiera expresar otros valores, o especular haciendo politiquería tiene todo el derecho a seguir su camino”.
A su vez Andrés “Peti” Lombardi, Pte. de la Cámara de Diputados de Mendoza, en declaraciones a este medio enfatizó: “Al Partido Demócrata lo sigue conduciendo la misma elite que lo conducía en los años 90 cuando era tercera fuerza. Nunca se sintieron cómodos dentro de la coalición Cambia Mendoza. Tienen ese problema de inicio, en segundo lugar, la dirigencia que conduce el partido está aislada prácticamente de los que están ejerciendo cargos, toman decisiones sesgadas por otra lectura de la realidad. En tercer lugar, dos diputados provinciales con que cuenta el Partido Demócrata, una se fue y otro se queda dentro de la Coalición. De los seis concejales que pertenecen al PD en toda la provincia solo uno se ha ido y los otros cinco van a seguir trabajando en forma coordinada con el Frente.”
En particular analizó: “No veo en el futuro electoral que actitudes políticas como estas puedan tener un peso gravitante, que le puedan costar electoralmente al Frente Cambia Mendoza. Nosotros representamos a los sectores productivos, a quienes creen en la institucionalidad del país y de la provincia, los que creen en el esfuerzo del trabajo, conceptos muy arraigados en Mendoza, y es muy difícil que ellos pueden captar ese electorado. Estos comportamientos son vistos por la sociedad como un intento de daño a quienes estamos decididos a enfrentar al populismo en la Argentina.”
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Mendoza, el Partido Demócrata se aleja de la coalición gobernante y agita el clima político
