viernes 3 mayo 2024

Bélgica. Los agricultores llevan su protesta contra los costos y la burocracia a la cumbre de la UE

Más Leídas

Bruselas. Con bocinas a todo volumen y motores rugiendo, cientos de agricultores  con sus tractores protestan y bloquean las calles a pocos pasos de la sede del Parlamento Europeo, en Bruselas.

Algunos de los manifestantes lanzaron piedras contras las fuerzas de seguridad que les impiden acercarse más al área que también alberga la sede de la Comisión Europea y el Consejo Europeo, mientras los líderes de los 27 países participan en la cumbre de la UE.

Otros arrojaron huevos que impactaron en las ventanas del edificio de la Eurocámara, mientras el humo se elevaba por las calles de otros puntos del centro de Bruselas, producto del fuego que prendieron a las barricadas.

Aunque el encuentro fue convocado con Ucrania como tema central –país para el que en las últimas horas Bruselas anunció que desbloquea 50.000 millones de euros adicionales en ayuda– la ira de los trabajadores del campo en el continente ha sido tal en las últimas semanas que su difícil situación logró ser incluida en la agenda de discusión este jueves, confirmó el primer ministro belga, Alexander De Croo.

“También debemos asegurarnos de que puedan obtener el precio correcto por los productos de alta calidad que ofrecen. También debemos asegurarnos de que la carga administrativa que tienen siga siendo razonable”, afirmó De Croo, cuyo país ocupa actualmente la presidencia de la UE.

La mecha de las protestas que inició a finales de 2023 en países como Alemania y Polonia, siguió en Francia hace más de dos semanas, donde los agricultores siguen bloqueando importantes vías en el país y esta semana la ira también se trasladó a las calles de varias localidades de Bélgica, incluida Bruselas.

Los motivos del enojo son comunes entre los agricultores de los países que pertenecen a la Unión Europea.

“Detener estas leyes locas”: agricultores de España e Italia se suman a la protesta en Bruselas

Los trabajadores del campo protestan por el aumento en los costos de energía, la subida de los precios de insumos como los fertilizantes, el incremento de importaciones en el bloque de alimentos más económicos que los cultivados en la UE –lo que tildan de competencia desleal, ya que no cumplen las mismas regulaciones-– y las cada vez más estrictas reglas del bloque de 27 naciones para el sector, en medio de medidas ambientales, pero que los manifestantes califican de burocracia y “asfixiantes”.

Entre ellas, las llamadas normas de retirada de tierras, que obligan a los agricultores a mantener cierta cantidad del suelo no productivo.

Los manifestantes aseguran que los altos costos que deben asumir, sumados a la inflación y el cambio climático, que marchitó, inundó o quemó sus cultivos, hacen muy difícil que puedan subsistir dignamente de su trabajo en el campo, por lo que exigen cambios inmediatos.

Algunos líderes políticos empiezan a responder a las voces de protesta. En Francia, donde continúan los bloqueos en importantes carreteras del país, incluidas vías que conducen a París, el primer ministro Gabriel Attal anunció en las últimas horas algunas medidas para el sector.

El premier anunció 150 millones de euros en ayudas fiscales y sociales para este año, y lo que llamó cláusulas de salvaguarda, incluida una que veta «la importación de frutas y verduras tratadas con pesticidas que están prohibidas aquí en Europa y lo hacemos con precedente de lo que hará Europa, es el símbolo de una nueva política, una cláusula espejo», aseguró.

Un día antes se llevaron a cabo cuatro reuniones en la Administración de Emmanuel Macron para abordar la situación, por lo que se esperaba que su Gobierno anunciara medidas este jueves para calmar la furia de los agricultores.

Poco antes, el Gobierno de Portugal anunció un paquete de ayuda de 500 millones de euros para los agricultores, un intento por frenar que la onda expansiva de movilizaciones y bloqueos llegue a su territorio.

Entre las medidas, la ministra de Agricultura, Maria do Ceu Antunes, anunció una reducción del 55 % en el impuesto al combustible diésel para el sector agrícola y 120 millones de euros adicionales para apoyar la agricultura orgánica y la agricultura mixta.

Unos 200 millones de euros se destinaron a mitigar el impacto de una prolongada sequía sobre los ingresos de los agricultores.

«Somos muy conscientes de las dificultades de los últimos cuatro años (…) Este paquete busca satisfacer las expectativas de los agricultores», afirmó Ceu Antunes.

INT/ag.agencias.rt.europapress/rp.

Últimas Noticias

Escándalo de los Seguros: El juez le pidió a Alberto Fernández que designe a un abogado para defenderse y se complica su situación en...

En el escándalo de los seguros, Alberto Fernández se encuentra inhibido, se ordenó el levantamiento fiscal y bancario sobre...

Más Noticias