Fue la afirmación terminante del gobernador Axel Kicillof. Se trata de un total de 7.148 millones de dólares de deuda emitida bajo ley extranjera, que representa el 81% del total de la deuda con el sector privado. Con estos acreedores el gobernador intentará avanzar en un acuerdo que posibilite convertir en sostenible el endeudamiento provincial.
Kicillof consideró necesaria una extensión de los plazos y un período de gracia inicial para el pago de la deuda ya que el gobierno debe centrar sus esfuerzos en frenar la pandemia del Covid-19. Según explicó el gobernador, los vencimientos están concentrados en un lapso de 3,3 años, lo que significa que entre 2021 y 2023 deberían pagarse uno 6.413 millones de dólares, imposibles de ser refinanciados con el riesgo país rondando los 3.600 puntos básicos.
La administración provincial estima que la recesión se mantendrá durante los próximos dos años, y recién sería factible llegar a un equilibrio fiscal hacia fines de 2022 o inicios de 2023. El ministro de Economía, Pablo López, insistió que la reprogramación adquiere, por lo tanto, una gran magnitud en virtud que los servicios de la deuda deben ser consistentes con el crecimiento de la provincia que será negativo por 1,3% en 2020 y del 2% al 3% en 2021 y del 2% al 2,5% en 2022 mientras se espera un crecimiento sostenido entre 1,7% y 2,2% a partir de 2023.
Según la información distribuida por la administración bonaerense, del total de 10.420 millones de dólares que se debían a fin del mes marzo, el 85%, unos 8.857 millones de dólares era con el sector privado. De estos, solo el 19% estaba denominado bajo ley argentina o era con organismos internacionales de crédito, con refinanciación factible, mientras que el 81%, 7.148 millones de dólares estaban en manos de bonistas privados y serán con los que el gobierno provincial intentará negociar antes de ir a un default.
Con los organismos multilaterales de crédito, la deuda asciende a 706 millones de dólares y Kicillof confía que podrá seguir sosteniendo los pagos, mientras que con la deuda en pesos (equivalente a otros 803 millones de dólares) adelantó que adoptaría la estrategia de Guzmán de ir canjeándola a tasas que permitan una trayectoria sostenible.
rp.
