En la última reunión que mantuvo el presidente Fernández con los gobernadores, arreciaron las demandas por asistencia financiera, en paralelo con la caída de los ingresos fiscales a raíz de la extensa cuarentena, provocando severos daños en las finanzas provinciales.
El problema se agudizó cuando tomó estado público el monto y el destino de los fondos transferidos a las arcas provinciales, tal como surge de la información oficial de Hacienda. En el reparto surgen réprobos y elegidos y no aparecen las explicaciones que permitan entender desequilibrios de magnitud.
Esta situación motivó la presentación de un Proyecto de Resolución dirigido al Jefe de Gabinete de Ministros, efectuado por los diputados nacionales de Juntos por el Cambio, Gustavo Menna, Roxana Reyes y Lorena Matzen, en el que solicitan que se informe acerca de lo que caracterizan como “las transferencias discrecionales efectuadas por el Estado Nacional a las provincias durante el corriente año”.
El pedido de informes plantea las siguientes preguntas:
1°) Razones por las cuales la Provincia de Buenos Aires recibió el 52,50% de las transferencias mientras que ninguno de los restantes Estados recibió más del 5%.
2°) Fundamentos que justifiquen una distribución de recursos que no tiene en cuenta las pautas constitucionales de equidad y solidaridad federal, tales como los establecidos en los artículos 75 incisos 2 y 19 de la Constitución Nacional.
3°) Tratamiento dado a los reclamos que hubiesen efectuado los Estados provinciales por la desigualdad en la asignación de fondos federales a las provincias.
4°) Si existe una estrategia o programación para compensar en lo que resta del ejercicio fiscal a las provincias perjudicadas por el trato discriminatorio observado hasta el mes de junio del corriente año.
5°) Si se contempla asistir financieramente a la Provincia del Chubut en los términos contemplados por el artículo 75 inciso 9 de la Constitución, ante la insuficiencia de sus recursos ordinarios para cumplir con sus obligaciones más básicas, entre ellas el pago de salarios de los agentes públicos que registran dos meses de atraso y el impago del sueldo anual complementario del mes de junio.
A efectos de fundamentar el pedido de informes, se demuestra que la ejecución presupuestaria aplicada por el Gobierno Nacional hasta el día 16 de junio de 2020, en los distintos ítems que comprenden las transferencias discrecionales de fondos nacionales a las provincias, evidencian una inequidad patente que además denota una manifiesta arbitrariedad en el reparto de esos recursos.
Esta arbitrariedad queda de manifiesto cuando se observa que de los $ 159.297 millones asignados y transferidos a los Estados provinciales hasta la fecha indicada, la Provincia de Buenos Aires fue beneficiada con $ 83.660 millones, esto es, un 52,5% del total, lo que expone un claro desbalance y desproporción con las restantes jurisdicciones.
De hecho, quien le sigue en la nómina es la Provincia de Córdoba, pero con transferencias por tan solo $ 9.306 millones, un 5,8%. Esta brecha entre el Estado más beneficiado y el segundo -además del hecho de que uno solo absorba más de la mitad de los recursos- exime de mayores comentarios acerca de la desigualdad de trato que el Gobierno Nacional está brindando a las provincias.
En el caso de las provincias patagónicas la discriminación es aún más marcada: Chubut recibió solo $ 1.229 millones, un 0,8%; Río Negro $ 1.691, un 1,1%; Santa Cruz, $ 2.191, un 1,4%; Tierra del Fuego $ 741 millones, un 0,5%; Neuquén $ 1.682 millones, un 1,1% y La Pampa $ 2.247 millones, un 1,4%.
Con respecto a la asistencia financiera a las provincias, es donde más se aprecia la falta de equidad federal, ya que otros siete Estados recibieron sumas irrisorias, inferiores en todos los casos a $ 50 millones, y los restantes quince distritos no percibieron ni un solo peso.
Otro tanto ha acontecido con los fondos destinados a financiar el déficit de las cajas jubilatorias provinciales de los trece Estados que las conservan en sus respectivas jurisdicciones.
De esas trece provincias hay seis que no han recibido una sola remesa de los $ 16.912 millones que se llevan distribuidos hasta el presente. Entre ellas Chubut, que ha recibido $ 0,00, en franco contraste con los $ 6.000 millones transferidos a Buenos Aires.
El proyecto logra dejar en evidencia el centralismo y la falta de equidad en la distribución de recursos aplicada por el gobierno nacional, lo que justifica que el Jefe de Gabinete brinde las explicaciones de tan notorio desbalance en la distribución de los fondos federales.
La situación que padece la Provincia del Chubut merece un párrafo aparte, ya que se encuentra en virtual cesación de pagos, con una abultadísima deuda financiera contraída casi en su totalidad en moneda extranjera, con las regalías hidrocarburíferas cedidas en garantía de esa deuda, y adeudando dos meses de sueldos y el medio aguinaldo a todos sus empleados públicos, siendo el último salario que a la fecha han cobrado los agentes públicos el correspondiente al mes de abril.
Por último, el pedido de informes expresa que ante la comprobación de que hay disponibilidad de fondos para asistir a las provincias, pero que los mismos se han concentrado prácticamente en forma exclusiva en Buenos Aires, y la constatación de que en los ítems más relevantes, las asistencias financieras han sido totalmente nulas en lo que respecta a Chubut, imponen que el Jefe de Gabinete también se pronuncie sobre el particular y dé cuentas de cuál es la estrategia que piensa adoptar para rescatar a una provincia que también es parte de la República Argentina.
PR/BN/CC/rp.
