Washington DC. La base industrial de submarinos de Estados Unidos apoyará la asociación de tecnología de defensa AUKUS para suministrar a Australia submarinos de propulsión nuclear y se verá fortalecida por ese proyecto, dijo el miércoles un alto funcionario del Pentágono.
Mara Karlin, subsecretaria interina de Defensa para Políticas, hizo la declaración en una audiencia de un subcomité del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, durante una visita a Washington del primer ministro australiano, Anthony Albanese.
«AUKUS contribuye a construir un ecosistema de base industrial de defensa más robusto que contribuya a la disuasión integrada; y… la base industrial submarina puede apoyar y apoyará a AUKUS», dijo.
En una declaración conjunta, los tres representantes de la Marina estadounidense que testificaron en la audiencia instaron al Congreso a seguir adelante con la solicitud de presupuesto suplementario presentada el pasado viernes por el presidente Joe Biden, que destina 3.400 millones de dólares para nuevas inversiones en la base industrial de submarinos estadounidense.
«Esta financiación es fundamental para mejorar las tasas de construcción y mantenimiento de los submarinos de ataque con el fin de cumplir con los requisitos militares de Estados Unidos, y también respaldará nuestros compromisos bajo AUKUS», dijo.
Veinticinco legisladores republicanos estadounidenses instaron a Biden en julio a aumentar la financiación para la flota de submarinos estadounidenses, diciendo que el plan de AUKUS para vender a Australia submarinos de energía nuclear de clase Virginia «debilitaría inaceptablemente» la flota estadounidense sin un plan claro para reemplazarlos. .
Karlin dijo que el Congreso fue fundamental para el éxito de AUKUS, el mayor proyecto de defensa en la historia de Australia acordado en respuesta al creciente poder de China en el Indo-Pacífico.
Subrayó la necesidad de que el Congreso apruebe este año propuestas legislativas para autorizar la transferencia de submarinos a Australia, permitir el mantenimiento de submarinos estadounidenses en Australia y Gran Bretaña y autorizar la financiación australiana para astilleros estadounidenses y la formación de trabajadores australianos en ellos.
También destacó una cuarta propuesta para racionalizar el comercio de defensa entre los tres socios de AUKUS, algo vital para AUKUS dada la necesidad de compartir tecnología estadounidense en el proyecto submarino y un segundo pilar de AUKUS que implica la cooperación tripartita en armamento de alta tecnología.
Los funcionarios australianos y británicos han expresado su frustración porque los controles de exportación estadounidenses impiden un progreso más rápido en AUKUS.
Albanese celebró conversaciones cumbre con Biden el miércoles que incluyeron el proyecto AUKUS, y el representante demócrata Joe Courtney dijo en la audiencia que el líder australiano tendría la oportunidad de discutirlo con miembros de la Cámara y el Senado de Estados Unidos el jueves.
En una conferencia de prensa conjunta con Albanese, Biden también instó al Congreso a aprobar la legislación AUKUS este año.
El vicealmirante William Houston, comandante de la Fuerza Submarina de la Marina de los EE. UU., dijo en la audiencia que era «absolutamente crítico» que el Congreso avanzara con las propuestas, diciendo que no hacerlo enviaría un mensaje negativo «significativo» al Indo-Pacífico.
La industria de submarinos de EE. UU. espera poder mejorar su tasa de producción para satisfacer la demanda de la Armada de EE. UU. y AUKUS.
El «hecho es que la cadena de suministro sigue siendo muy frágil», dijo el miércoles a los analistas Jason Aiken, director financiero de General Dynamics. «Cualquier financiación y apoyo adicional, ya sea a través del apoyo suplementario o de otro tipo de la Marina, sería de gran ayuda».
Aiken dijo que su compañía necesitaba aumentar su tasa de producción de 1,2 submarinos de clase Virginia por año a dos, además de un submarino de clase Columbia. «Entonces miraremos a AUKUS más allá de eso».
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